viernes, 21 de diciembre de 2012

VALORACIÓN POSITIVA DE LA DIFERENCIA


Hay que generar actitudes y conductas positivas hacia personas de otras culturas. De esta manera, la valoración positiva de la diferencia es:
- Un objetivo a conseguir a lo largo del proceso de educación intercultural.
- Una condición previa y necesaria para poder:
   * Transformar las actitudes y conductas negativas hacia personas de otras culturas.
   * Generar hacia esas personas, actitudes y hábitos de conducta positivos.
La educación intercultural no es un programa cerrado que pueda repetirse constantemente sin modificarlo. Por el contrario, la gama de actividades y actuaciones que se enmarcan dentro del concepto de educación intercultural es muy amplia, por lo que no es posible dar recetas que nos aseguren el éxito.
Nosotros mismos tenemos que saber situar los límites de cada actividad que pongamos en marcha.
Tenemos que ser conscientes que los objetivos que podamos alcanzar están en función de:
- El contenido y la amplitud de la actividad que estemos pensando en realizar. No debemos de caer  en el error de pretender "cazar un elefante utilizando un caza mariposas".
- El concepto en el que vamos a trabajar y las limitaciones que éste nos impone. La implicación y motivación de los asistentes a una actividad extraescolar de carácter obligatorio, suele ser inferior que si la actividad tiene un carácter voluntario.
- El grado conocimiento y relación que mantengamos con los jóvenes con los que vamos a trabajar. Si mantenemos una relación continuada es posible pensar en una acción más prolongada en el tiempo encaminada a unos objetivos de mayor alcance que si se trata de jóvenes con los que sólo vamos a realizar una actividad puntual.
- El grado de implicación en la actividad de los destinatarios. En la medida que una actividad se sienta como algo propio, se favorecerán unos resultados más positivos que si los destinatarios perciben que sólo se les atribuye un papel pasivo.
Por otro lado hemos de tener en cuenta que:
- Las actividades puntuales tienen escaso sentido. Lo deseable es que cada actividad se enmarque dentro de un proceso más amplio.
- Los contenidos de las actividades deben partir y estar referidos a la realidad cotidiana de los destinatarios. No se trata de favorecer actitudes contrarias al apartheid en Sudáfrica, sino, de generar actitudes positivas en nuestro entorno más cercano y en nuestro día a día.
En cualquier caso conviene tener en cuenta que partiendo de una metodología de trabajo activa y dinámica, tenemos que enfocar nuestro trabajo como un proceso, a lo largo del cual, mediante la información, el análisis y la reflexión crítica de su realidad, los destinatarios de nuestro trabajo sean capaces de:
- Plantear en su vida cotidiana la relación con personas de otras culturas de un modo positivo.
- En la medida de sus posibilidades, trasladar a su entorno más inmediato, mediante la acción individual y colectiva, esa relación positiva con personas de otras culturas.
 
 

sábado, 15 de diciembre de 2012

CRITERIOS A TENER EN CUENTA

 
 
La educación intercultural no tiene comienzo ni fin, es un proceso contínuo.
Ante los problemas que surgen en las sociedades en relación a la valoración negativa de la diferencia y de la diversidad cultural, las personas, sea cual sea su edad, no pueden saltar directamente de una situación de desinformación, en un ambiente cargado de prejuicios y estereotipos negativos, a una situación de conciencia crítica y de acción en contra de estos problemas.
La educación intercultural a de dirigirse hacia el origen de los problemas y no únicamente hacia las manifestaciones de esos problemas.
Las actitudes y conductas negativas que las sociedades mayoritarias suelen tener hacia las minoritarias se deben en gran medida a:
- Una valoración social negativa de la diferencia entre los seres humanos.
- La utilización de esa diferencia como elemento discriminatorio 
 
 
 
 


martes, 11 de diciembre de 2012

EDUCACIÓN INTERCULTURAL NO FORMAL



Se entiende por educación intercultural no formal aquellas acciones e iniciativas dirigidas a alcanzar los objetivos de la educación intercultural, que no tiene un carácter reglado académico y que se caracterizan por una metodología participativa, dinámica y cooperativa.
La educación intercultural no formal puede desarrollarse dentro y fuera de la escuela, pero en el primer caso se trataría de actividades extraescolares que pueden ser organizadas por la propia escuela, o a iniciativa de otras instituciones (ayuntamientos, asociaciones, etc.).
En la animación socio cultural encontramos uno de los pilares fundamentales para el desarrollo de esta educación intercultural no formal. Esta constituye un importante marco metodológico en el que se encuentran las actividades y acciones cuya amplitud, alcance, objetivos y destinatarios variarán según los casos, y que permiten trabajar diversos contenidos relacionados con la educación intercultural.
Los procesos de animación sociocultural y comunitaria, ofrecen a los agentes sociales de una comunidad, en especial organizaciones y asociaciones, la posibilidad de ejercer un rol fundamental en este tipo de educación.
Para la educación intercultural es necesario...
Ver desde fuera:
- Nuestra propia realidad personal y social.
- La reacción ante otras realidades culturales y sociales.
- Aparición y consolidación de los fenómenos de discriminación, racismo y xenofobia.
Asumir el mundo en el que vivimos:
- Vivimos en un mundo interdependiente. Un mundo que nos pertenece a todos, sea cual sea nuestro   lugar de procedencia.
- La responsabilidad compartida.
Conocer otras realidades:
- ¿Qué conocemos de otras culturas y sociedades?.
- No hay culturas buenas o malas, mejores o peores, superiores o inferiores.
- Diferente no significa peor, significa distinto.
Para llegar a valorar positivamente la diferencia:
- Nuestra propia cultura y sociedad es un mosaico de diferencias.
- La diferencia es un elemento enriquecedor, tanto a nivel personal como a nivel colectivo y social.
Y a partir de aquí transformar las actitudes y conductas negativas hacia personas de otras culturas, en actitudes y conductas positivas:
Hay que erradicar el miedo, distanciamiento, sentimiento de superioridad, rechazo, discriminación, prejuicios, estereotipos, racismo y xenofobia. Adquiriendo en su lugar los de conocimiento, reconocimiento, valoración, aceptación, tolerancia, solidaridad y respeto.
En definitiva aceptar como iguales a las personas de otras culturas que llegan o viven en nuestra sociedad.
Estas actitudes y conductas son la base de la sociedad intercultural. Convivencia pacífica y enriquecedora entre distintas culturas  y relaciones positivas basadas en la valoración y el reconocimiento mutuos.
La diferencia entre educación intercultural formal o no formal se encuentra en el método de trabajo. Sin embargo la educación no formal cuenta con algunas características que, en principio, favorecen mejores resultados:
- La educación no formal no tiene el carácter obligatorio de la educación formal, carácter que puede conferir connotaciones negativas a cualquier tema que se presente como parte de una asignatura.
- En la educación no formal existe un contacto más estrecho con los destinatarios.
- La educación no formal facilita una adaptación de los contenidos que se van a trabajar en la realidad y necesidades de los destinatarios.
- La educación no formal posibilita en mayor grado la adaptación de los objetivos que se pueden conseguir según sea la actividad que se realice.
- La metodología dinámica, activa y participativa con la que debe trabajarse en educación no formal, desarrollada en muchas ocasiones de forma lúdica, propicia una mayor implicación de los destinatarios.
En el caso concreto de la educación intercultural y aunque ambas líneas de trabajo no son incompatibles y deben coexistir, la educación intercultural no formal es un instrumento especialmente útil para ir desmontando paulatinamente ese discurso social, característico de las sociedades mayoritarias, según el cual las poblaciones y culturas minoritarias son las que únicamente debes de realizar todos los esfuerzos por integrarse, ya que la sociedad mayoritaria suele pensar y argumentar que ya hacen bastante permitiendo esa integración. 
 
 


domingo, 9 de diciembre de 2012

OBJETIVOS


Para que una sociedad llegue a ser realmente intercultural, todos los grupos sociales implicados en ella han de encontrarse en condiciones de igualdad. Esta igualdad sólo puede alcanzarse trabajando desde una doble perspectiva: socioeconómica y sociocultural.
Dentro de esta perspectiva sociocultural, la educación intercultural, entendida como un proceso amplio de educación social, es una de las principales herramientas con las que contamos hoy en día para hacer frente a los problemas de relación, entendimiento y respeto que se dan en los distintos ámbitos de nuestra sociedad.
Este objetivo implica:
- Conseguir que la diversidad deje de ser un motivo de marginación.
- Realizar un esfuerzo por mantener las distintas identidades culturales.
El objetivo general de la educación intercultural ha de ser favorecer y reforzar las bases de una relación recíproca bien entre sociedades distintas, bien entre distintos grupos culturales ya sean mayoritarios o minoritarios.
Tal objetivo general supone que la educación intercultural ha de realizarse con el conjunto de la sociedad. No es posible aspirar a una sociedad intercultural trabajando únicamente, como pretendían los primeros programas interculturales, con una de las partes implicadas, es decir, con los grupos minoritarios.
No obstante, por su propia situación, las necesidades respecto a la educación intercultural de los grupos socialmente mayoritarios y de los grupos minoritarios, son muy diferentes.
En la mayoría de las ocasiones, los grupos minoritarios, especialmente cuando son resultado de procesos de inmigración, necesitan en primer lugar adquirir una serie de habilidades y destrezas sin las cuales no es posible la adaptación e incorporación a su nueva sociedad. En el caso de los grupos mayoritarios las necesidades se orientan fundamentalmente, hacia la modificación de los esquemas y formas de pensamiento inadecuadas, estereotipos y prejuicios, que están detrás de las actitudes y conductas negativas frente a los grupos minoritarios.
Estas necesidades diferentes se traducen, lógicamente, en objetivos diferentes.
En el caso de los grupos socialmente mayoritarios, los objetivos de la educación intercultural son:
- Propiciar una toma de conciencia sobre la realidad de un mundo interdependiente que favorezca unos hábitos de conducta consecuentes con dicha realidad.
- Modificar el discurso social basado en prejuicios y estereotípos étnicos negativos.
- Favorecer una valoración positiva de la diferencia y la diversidad.
- Generar actitudes y hábitos de conducta positivos ante personas procedentes de sociedades y culturas que no son las nuestras.
Mientras que en los grupos minoritarios, el objetivo de la educación intercultural ha de ser favorecer su incorporación a la sociedad mayoritaria, sin que ello suponga la pérdida de su propia identidad cultural.

Aunque, como ya se ha dicho, la educación intercultural ha de realizarse con el conjunto de la sociedad, no cabe duda de que los niños, niñas y jóvenes, tanto de los grupos mayoritarios como minoritarios, constituyen el principal sector destinatario de la educación intercultural. Esta prioridad se justifica porque ellos y ellas serán en gran medida los ciudadanos y las ciudadanas de las sociedades interculturales.
En el caso concreto de los sectores más jóvenes de la población, el objetivo de la educación intercultural de favorecer y reforzar las bases de una relación recíproca entre sociedades distintas, adquiere un significado pleno.
La educación intercultural dirigida a los sectores más jóvenes de las sociedades mayoritarias es especialmente importante ya que, a pesar de la dificultad que supone trabajar en contra del ambiente social predominante, las características de este sector de población facilitan, en mayor medida que en las de la población adulta, el trabajo dirigido ha conseguir no sólo la aceptación de las personas procedentes de otras sociedades y culturas, sino el establecimiento de unas relaciones positivas.
Cuando la educación intercultural se dirige a los sectores más jóvenes de la población mayoritaria, los objetivos generales ya señalados,enfocan el trabajo de cara a conseguir que:
- Los niños, niñas y jóvenes desarrollen la capacidad de reconocer los prejuicios y estereotipos, el racismo y la xenofobia, vinculados a las percepciones distorsionadas que puedan tener de nuestro mundo, de cara a superar actitudes de discriminación y marginación de otras personas y colectivos.
- Proporcionar los conocimientos y habilidades que les ayuden a desafiar y a intentar cambiar estas manifestaciones cuando se encuentren con ellas en la sociedad, y que puedan trasladar la idea de respeto, entendimiento, comprensión y tolerancia entre las gentes y los pueblos, desde su realidad local a la realidad global del mundo en que vivimos.
La consecución de los objetivos planteados por la educación intercultural pueden lograrse a través de una gran diversidad de iniciativas y actuaciones cuyo alcance variará según los casos. Sin embargo, es posible diferenciar dos grandes líneas de trabajo en el desarrollo de la educación intercultural:
- Desde la perspectiva de la educación formal.
- Desde la perspectiva de la educación no formal. Que es en la que nos vamos a centrar. 

sábado, 1 de diciembre de 2012

CENSO DE POBLACIÓN INMIGRANTE

El porcentaje de inmigrantes en España en el año 2010 con una población total de 47.021.031 el número total de inmigrantes era de 5.708.940 lo cual representaba el 12,14 % de la población.
Estos mismos datos en Cataluña con una población total de 7.512.381 y un número total de emigrantes de 1.193.283 lo que representa el 18.15% de la población catalana.
TOP TEN procedencia en el mismo año 2010
1º Rumanía con 829.715 inmigrantes.
2º Marruecos con 746.760 inmigrantes.
3º Ecuador con 395.069 inmigrantes.
4º Reino Unido con 387.226 inmigrantes.
5º Colombia con 289.296 inmigrantes.
6º Bolivia con 210.624 inmigrantes.
7º Alemania con 195.579 inmigrantes.
8º Bulgaria con 169.195 inmigrantes.
9º China con 156.607 inmigrantes.
10º Portugal con 142.299 inmigrantes.

A todos estos habría que sumar a la etnia gitana, de los cuales no podemos obtener datos fiables de población, puesto que si son españoles no se hace ninguna otra referencia en el censo. Pero no dejan de tener una cultura singular, la cual es de tener en cuenta en los programas de educación para la interculturalidad.

 
 
Vídeo producido por la oficina de derechos sociales de Sevilla en el que se recogen y desmontan los estereotipos más frecuentes en inmigración.
Los inmigrantes son el 12 % de la población y absorben el 6,8 % de los servicios sociales. http://www.lavanguardia.com/vida/20110505/54149365302/los-inmigrantes-son-el-12-de-la-poblacion-y-absorben-el-6-8-de-los-servicios-sociales.html
 

miércoles, 28 de noviembre de 2012

introducción

 
Las sociedades actuales son cada vez más diversas, en ellas conviven un hervidero de gentes de razas y culturas diferentes. Este hecho se va incrementando de forma progresiva en Europa debido a las tendencias migratorias que se van produciendo en el mundo. Es urgente tomar conciencia de que vivimos en una sociedad compleja, lo que exige formar a las personas en valores, actitudes y comportamientos democráticos. De este modo podemos construir un futuro mejor, una sociedad más plural y lograr la riqueza que aporta la diversidad cultural.
La educación desempeña un papel decisivo en el desarrollo del interculturalismo, porque la educación es el elemento fundamental para el éxito de la integración en el mundo, para promover y proteger la identidad cultural y para conseguir personas autónomas y capaces de defender y promover los derechos en el mundo globalizado. El reto intercultural es pensar en el individuo como ser capaz de combinar la cultura universalizada y la circundante, realizando desplazamientos de una a otra sin problemas, porque su yo multifacético, está inevitablemente abierto incluso a influencias procedentes de fuera de su entorno. La educación multicultural es un ejercício de tolerancia, respeto, es un modo de fortalecimiento personal o autoestima y del grupo, es promotora de innovación y solidaridad, respeto a la igualdad y a la diferencia cultural, respeto a la justicia.
 En todo este proceso de convivir con otras personas, otras culturas, otras sociedades, han surgido distintos términos como multiculturalismo, interculturalismo que en ocasiones pueden llegar a confundirse. Daremos una definición de cada uno de ellos.
Entendemos por multiculturalismo los numerosos conjuntos de modos de vida, costumbres conocimientos y grados de desarrollo artístico, científico e industrial en cada grupo social asentado en un mismo espacio geográfico".
Se puede definir también como "las distintas formas en que cada uno de los pueblos manifiesta sus costumbres, tradiciones y fundamentos" (Quicios, P. en López-Barajas, 2007:416).
Tal vez una de las características más importantes del multiculturalismo y la multiculturalidad, sea que tiende a proteger, afianzar,defender y hasta blindar las señas de identidad de cada una de las culturas, precisamente para que no haya un sometimiento de una sociedad a otra y de una cultura a otra, para que no haya un dominio de la cultura mayoritaria sobre la minoritaria. Considerada esta última desde un punto de vista cultural y social como un colectivo normalmente de escasas dimensiones, definido por rasgos culturales innegociables, etnia, lengua, religión, cultura, tradiciones, etc., que se encuentra en una situación de dependencia respecto a una estructura de poder.
Interculturalismo es el compartir y aprender a través de las culturas con el fin de promover el entendimiento, la igualdad, la armonía y la justicia en una sociedad diversificada. Es el respeto a la diferencia, expresión de la libertad, manifestación de la participación y la tolerancia que niega cualquier cultura superior. Se trata de una interacción entre culturas, de una forma respetuosa, donde ninguna cultura es superior a otra, favoreciendo en todo momento la integración y la convivencia entre ellas. Las relaciones interculturales se basan en el respeto a la diversidad y el mutuo enriquecimiento; no es un proceso exento de conflictos, que se solucionan a través del respeto, diálogo, la concertación y la sinergia.
La interculturalidad no se ocupa sólo de la interacción entre etnias sino también entre hombre y mujer, niño y anciano, rico y pobre, etc. Es una actitud de enriquecimiento social y cultural basada en el respeto y el aprendizaje mutuo. Se utiliza para denotar la riqueza potencial que origina la interconexión de culturas en permanente diálogo en un mundo globalizado.
 
 
Interculturalidad es la interconexión que se da en un escenario geográfico y temporal determinado de culturas diferentes en permanente diálogo con una actitud aperturista constructiva y enriquezedora, en continuo proceso de realización.
(Quicios, P. en López-Barajas, 2007:425). 
Bibliografía: Derchos humanos, educación y sociedad de Albert Gómez, Mª Jose
 
 

http://www.ivoox.com/interculturalidad-puntos-encuentro-entre-audios-mp3_rf_1476011_1.html